Oración vespertina de confianza en Dios

Dios de mi justicia, responde a mi clamor cuando estoy angustiado, tu me confundes aliento; compadecete de mi y escucha mi oración, ustedes, hombres mortales, hasta cuándo ofenderan al que es mi Gloria, y amaran y buscarán la falsedad y la mentira, enterense de una vez: el señor escoge a los hombres justos, así que me escuchara cuando yo lo invoque. Pónganse a temblar, y no pequen; más bien, mediten en sus camas guarden silencio. Ofrezcan al señor sacrificios de justicia. Son muchos los que preguntan quién nos hará ver el bien, que la luz de tu rostro, señor, nos ilumine. Tu pusiste en mi corazón más alegría que la de tener trigo y vino en abundancia. Por eso me acuesto y duermo en paz, porque sólo tu, señor, me haces vivir confiado.